No olvide apagar el equipo y desenchufar el cable de alimentación antes de efectuar la limpieza.
No utilice pañuelos de papel, papel de cocina, tejidos ásperos ni materiales similares para la limpieza, puesto que podrían rayar la superficie. El polvo y las fibras de los pañuelos de papel se pueden quedar dentro del equipo y provocar problemas, como el bloqueo del cabezal de impresión y unos resultados de impresión deficientes. Asegúrese de utilizar un paño suave y seco.
No utilice nunca líquidos volátiles, como disolventes, benceno, acetona o cualquier otro limpiador químico para limpiar el equipo, ya que podrían provocar un fallo de funcionamiento o dañar la superficie del equipo.